Los campings se han convertido en verdaderos oasis para las familias, haciendo las delicias de niños y adultos. Por un lado los padres pueden descansar y relacionarse con otros adultos, con la tranquilidad de que sus hijos están en un entorno seguro y por otro lado, los niños pueden disfrutar de la naturaleza y las diferentes actividades propuestas por el camping. Un acierto total, ya sea en caraba, remolque o bungalow.